Por Juan Tomás Valenzuela
Hay muchos que ven la unión
de estos macos y cacatas
desde una óptica cegata
y falta de comprensión.
Y se han dado, a la sazón,
la tarea de despreciarla,
sin siquiera analizarla
en sus más simples detalles
y se tiran a la calle,
tan solo a satanizarla.
Aunque les sobra razón,
a los que dudan del plan,
no reparan, en su afán
de enfrentar la corrupción,
de ver que esta ocasión
se presenta un panorama,
en que el control de la cama
está en mano de un canalla,
de un zopenco y de un ampaya,
provistos de mala fama.
Hoy están los tres poderes
en manos del mismo hampón
y esto es sobrada razón
para que se considere,
hacer pacto, si se quiere,
con el mismito demonio,
pá que gente como Antonio
asciendan a una Curúl
e impidan que algún tahúr
venga con su pandemonio.
Yo estoy dispuesto a apoyar
al mismo Félix Bautista,
si esto frena a la arribista,
hermana del caporal,
que se quiere perpetuar
a través de su delfín.
Un zopenco malandrín,
carente de inteligencia,
que aunque nunca tuvo herencia,
ya es más rico que Pepín.
La vez que Rosario Sánchez
hizo entrada por Haití,
le dijo a algún baladí
que se enfrentó a sus comanches,
-Aquel que vea que me enganche
en tan singular cruzada,
que entienda que no me agrada
hacerlo de esta manera,
pero ¡Yo soy la bandera!
mientras que vos no sois nada-
Quien peleó por los cristianos
cuando Nerón, quemó Roma,
no fue Pedro, ni Mahoma,
ni un sacerdote pagano.
El que se quemó las manos
pá salvar al cristianismo,
aunque no lo crean, fue el mismo
por el que Jesús, murió,
porque se reivindicó
y allí enfrentó al satanismo.
Da pena que tanta gente
que yo creía preparada,
hoy estén tán despistadas
con los eventos recientes.
En la contienda del 20
el objetivo es Danilo,
y el que tenga otro objetivo,
ya sea Luís o sea Leonel,
pues que se vaya con él…
que yo seré comprensivo.
Juan de los Palotes
17 noviembre 2019